Unas gotas de nuestro brebaje literario y, sobre todo, coloquial, es la frase de Querer es Poder. A menudo me detengo en el diccionario, para ver si las palabras que forman algunos refranes son lo que tengo entendido. Así me aseguro de que estoy digiriendo bien el mensaje. México es tan vasto que en ocasiones los mismos términos me orillan a confundir algunos de ellos.
Si aplicamos estas gotitas de sabiduría a la vida cotidiana podremos inundar el país de realidades y no de sueños o anhelos a medias. Podríamos, inclusive, acabar con el problema el Narcotráfico en un “santiamén”. Ahí está el ejemplo de Brasil, un país que en los últimos años ha crecido de manera importante.
Ojalá nuestro feliPILLO tuviera la decisión de hacer las cosas del ex presidente Lula o de la ahora Presidenta de Brasil, Dilma Vana Rousseff. Vieron como sacaron de los pelos a los Narcotraficantes de la Favela de Alamao. Se encontraban arrinconados cerca de 600 narcotraficantes y como si fuera telenovela de Telerisa, les dijeron que iban a ir por ellos. Les pidieron que se entregaran por la paz y nada, no hubo respuesta positiva. Ante esto el Gobierno brasileño envió aproximadamente a mil 600 elementos del Ejército, Policía Civil y Federal y los sacaron sin mayores problemas.
Este es un golpe muy duro para el narcotráfico en aquella zona. Eso es querer hacer las cosas, dicen los asociados de esta oficina. Mientras aquí, nuestro Presi se desborda por decir que vamos ganando la guerra, los ciudadanos vemos cómo tal guerra no existe, o por lo menos el Gobierno Federal no hace nada para entrarle a los cocolazos. La guerra es entre los grupos armados y de refilón se llevan a gente inocente.
Los ciudadanos vemos que hay complicidad de parte de las autoridades gubernamentales de este país. Ya que si de verdad quisieran hacer las cosas podríamos acabar con el Narcotráfico, también tener un crecimiento económico.
Querer es poder ojalá algún día los gobiernos quieran cumplir con su trabajo
Y como dijo Sólo: “Los Dejo”.
Si aplicamos estas gotitas de sabiduría a la vida cotidiana podremos inundar el país de realidades y no de sueños o anhelos a medias. Podríamos, inclusive, acabar con el problema el Narcotráfico en un “santiamén”. Ahí está el ejemplo de Brasil, un país que en los últimos años ha crecido de manera importante.
Ojalá nuestro feliPILLO tuviera la decisión de hacer las cosas del ex presidente Lula o de la ahora Presidenta de Brasil, Dilma Vana Rousseff. Vieron como sacaron de los pelos a los Narcotraficantes de la Favela de Alamao. Se encontraban arrinconados cerca de 600 narcotraficantes y como si fuera telenovela de Telerisa, les dijeron que iban a ir por ellos. Les pidieron que se entregaran por la paz y nada, no hubo respuesta positiva. Ante esto el Gobierno brasileño envió aproximadamente a mil 600 elementos del Ejército, Policía Civil y Federal y los sacaron sin mayores problemas.
Este es un golpe muy duro para el narcotráfico en aquella zona. Eso es querer hacer las cosas, dicen los asociados de esta oficina. Mientras aquí, nuestro Presi se desborda por decir que vamos ganando la guerra, los ciudadanos vemos cómo tal guerra no existe, o por lo menos el Gobierno Federal no hace nada para entrarle a los cocolazos. La guerra es entre los grupos armados y de refilón se llevan a gente inocente.
Los ciudadanos vemos que hay complicidad de parte de las autoridades gubernamentales de este país. Ya que si de verdad quisieran hacer las cosas podríamos acabar con el Narcotráfico, también tener un crecimiento económico.
Querer es poder ojalá algún día los gobiernos quieran cumplir con su trabajo
Y como dijo Sólo: “Los Dejo”.
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