10 años en el poder del gobierno panista (inserte aquí su expresión favorita de asombro). No es por nada pero este gobierno federal, lo que reconozco es que le ha entrado a los cocolazos, lo que nunca había hecho el PRI, pero la verdad es que la pelea está muy dispareja. En una esquina vemos al oriundo de Michoacán que por los barrios vecinos del Sur le llaman El Margarito y de la otra esquina un bravo Narcotráfico que pega como los puños de Pacquaio.
Comienza la batalla por ahí del 2006 cuando el referi electoral decide que feliPILLO es quien rete al Pacquiao. Desde el Primer Round le entra a Margarito un jab certero a punta de pistola. Margarito es sacudido pero se ve entero aún, el muchacho. Pacquiao pega duro y se esconde tras la lentitud gubernamental. Huye por los correderos de los estados y se filtra en las instituciones de Gobierno.
Desde el fondo se oyen unas mentadas de madres muy tempranas. Los Padres de los niños de la Guardería ABC le recuerdan la progenitora al michoacano. Le reclaman la decrepitud de este Gobierno con malformaciones antidemocráticas.
En los primeros 5 rounds Margarito presume ir ganando. Efectivamente va ganando en golpes recibidos. Tiene toda la piamadre rasgada y la vista se le comienza a opacar. Toma aire, a legua se nota quién ganara, pero Margarito sigue de pie, como buen Mexicano.
Empieza el octavo Round del sexenio y el michoacano ya padece un dolor de ijares que le trepa desde la rabadilla económica y en su esquina ya le diagnosticaron un catarrito, por el Doctor Gangsters, quien le recomendó tirar la toalla y emprender la huída con la mayor parte de BANXICO.
Los narradores de la batalla han perdido interés y por la pantallita de su escritorio ya no están viendo la pelea sino las telenovelas. Si, estimado público, Angélica Maricela le ha dado el “sí me caso” a Gustavo Santiago Pedro (este nombre es vergonzosamente real).
Es el décimo round y el michoacano recibió instrucciones en su esquina de esperar la captura del capo más grande para poder noquear a los críticos sociales y morales. Se oye un ¡¡Bara Bara Bara Bara, Bara Bara!! de Don Jaime que en las faldas del ring vende la pelea de Calderón contra el Narco ya con el resultado final, en DVD con sus menús y subtítulos de los golpes administrativos.
Faltan dos años para que termine la batalla y bien dicen No hay décimo malo.
Hasta aquí les puedo narrar la batalla es primero de diciembre y mejor vemos el DVD que nos regalaron una estampita de Andre Manue en el zócalo en busca de su reelección.
Y como dijo Sólo: “Los Dejo”.
Comienza la batalla por ahí del 2006 cuando el referi electoral decide que feliPILLO es quien rete al Pacquiao. Desde el Primer Round le entra a Margarito un jab certero a punta de pistola. Margarito es sacudido pero se ve entero aún, el muchacho. Pacquiao pega duro y se esconde tras la lentitud gubernamental. Huye por los correderos de los estados y se filtra en las instituciones de Gobierno.
Desde el fondo se oyen unas mentadas de madres muy tempranas. Los Padres de los niños de la Guardería ABC le recuerdan la progenitora al michoacano. Le reclaman la decrepitud de este Gobierno con malformaciones antidemocráticas.
En los primeros 5 rounds Margarito presume ir ganando. Efectivamente va ganando en golpes recibidos. Tiene toda la piamadre rasgada y la vista se le comienza a opacar. Toma aire, a legua se nota quién ganara, pero Margarito sigue de pie, como buen Mexicano.
Empieza el octavo Round del sexenio y el michoacano ya padece un dolor de ijares que le trepa desde la rabadilla económica y en su esquina ya le diagnosticaron un catarrito, por el Doctor Gangsters, quien le recomendó tirar la toalla y emprender la huída con la mayor parte de BANXICO.
Los narradores de la batalla han perdido interés y por la pantallita de su escritorio ya no están viendo la pelea sino las telenovelas. Si, estimado público, Angélica Maricela le ha dado el “sí me caso” a Gustavo Santiago Pedro (este nombre es vergonzosamente real).
Es el décimo round y el michoacano recibió instrucciones en su esquina de esperar la captura del capo más grande para poder noquear a los críticos sociales y morales. Se oye un ¡¡Bara Bara Bara Bara, Bara Bara!! de Don Jaime que en las faldas del ring vende la pelea de Calderón contra el Narco ya con el resultado final, en DVD con sus menús y subtítulos de los golpes administrativos.
Faltan dos años para que termine la batalla y bien dicen No hay décimo malo.
Hasta aquí les puedo narrar la batalla es primero de diciembre y mejor vemos el DVD que nos regalaron una estampita de Andre Manue en el zócalo en busca de su reelección.
Y como dijo Sólo: “Los Dejo”.
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