miércoles, 20 de octubre de 2010

Noche de Victoria.

Ayer en el Teatro Victoria, de la Ciudad de Durango, se estrenó la Obra Homenaje a los No nombrados de Cartucho (Libro de Nellie Campobello donde estampa la situación Revolucionaria de principios del Siglo Pasado), compuesta por el Maestro Lucio Lira Agüero.

En una época carente de compositores de frac, el surgimiento o reaparición de compositores de Estudios, viene a redimensionar la importancia de la Música Clásica en el Mundo.
Esa Música Clásica que, para muchos lamentablemente, es aburrida, resurge esporádicamente cuando no debería de ser así.

No me enfocaré a explicarles con manzanas lo que es la Música, porque, todos tenemos nuestra propia versión.
Llevar a cabo una composición de un nivel tan fastuoso como lo realizó nuestro Maestro Lucio Lira es un verdadero gozo.

En la actualidad la Música de calidad se encuentra retraída y archivada en los escritorios gubernamentales que se esmeran en enterrar la cultura.
Estamos en una época donde la Música se ha domesticado completamente. Se ha direccionado hacia un horizonte equivocado.

La obra presentada por el Maestro Lira describe la situación vivida en las épocas de la Revolución. Con Campanas, con murmullos, con sonrisas de los niños cantores de Durango que dirige el Maestro Guillermo Rodríguez.

Fue una noche especial. La obra fue dirigida por el propio compositor, quien se veía entusiasmado, ilusionado, comprometido con un proyecto musical de gran talla.

“A través de las narraciones de Nellie Campobello observamos, con el vertiginoso ritmo de una cámara fotográfica, estampas de hombres muertos y mujeres valientes en Cartucho. Relatos de la lucha en el Norte de México, publicado en 1931.
Nellie, con mirada y voz de infancia, nos enseña pantalones agujereados por las balas; pedacitos de carne amoratada, es decir, la oreja olvidada de un muerto; telas que hieren de mugrosas; la bolsa izquierda de un chaquetín”.

Bien por el Comité que organiza el Festival Revueltas al apoyar al talento Duranguense que no le pide nada a otros estados. Ojalá sigan surgiendo nuevos compositores en Durango, para que la cultura musical tenga un auge adecuado.

Y como dijo Sólo: “Los Dejo”.

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